La verdad es que no soporto el inmovilismo y creo que cuando las cosas van mal, hay que actuar. Dicho esto, hay un par de apreciaciones que me vienen a la mente estos días, entre tanta noticia y rumor. El primero es que parece que entre tanta iniciativa, la gran mayoría hacen foco en la reducción de gasto y demasiado poco empeño en la creación de trabajo. A mi parecer, y tampoco es que me dedique a devorar periódicos y noticieros estos días, se han limitado a facilitar y abaratar el despido para promover la contratación. Quizás me equivoque, pero esa es mi impresión.
En segundo lugar, creo que están intentando atacar el problema de los abusos en las prestaciones sociales, como por ejemplo, con el paro. Además, parece que van recortando algunas asistencias. Han iniciado una serie de acciones que pretenden acabar o reducir con los abusos, por ejemplo, que los parados tengan que presentarse físicamente en el INEM o que no puedan sellar en una localidad (¿o provincia?) distinta a la suya. Toda persona de bien está a favor de cualquier medida que ayude a que las ayudas lleguen a las personas que realmente las necesitan. Pero lo que chirría un poco es que estas iniciativas nos traten a todos como a estafadores. Somos muchos los que llevamos muchos años pagando sin parar. Que, por suerte, nunca hemos cobrado el paro. Que entendemos que dicha prestación es sólo en caso de extrema necesidad y no un derecho al que hemos accedido por haber pagado la préstación en cada nómina durante décadas. Que este sistema solo funcionará si contribuimos muchos más de los que optan a la prestación. Pero lo que no parece coherente es que como consecuencia de los abusos que se cometen por los miserables, nos perjudique tambien a los honrados en caso de algún día necesitar acudir a estas ayudas. La impresión que tengo estos días es que como tenga la desgracía de caer en el paro un año de estos, me van a aplicar las mismas normas que las personas que llevan toda la vida aprovechándose del sistema (y por lo tanto, de mí) ¿Cuánta gente conoce a personas que trabajan lo mínimo hasta tener derecho a cobrar el paro, una y otra vez? ¿Cuánta gente conoce a personas que "fuerzan" su despido para poder cobrar la indemnización y el paro? ¿Por qué se trata lo mismo a estas personas que a padres de familia que llevan 30 y 40 años cotizando sin haber cobrado paro ni ayuda alguna en sus vidas? ¿O por qué se trata lo mismo a estas personas que a gente que realmente lo necesita, hayan cotizado lo que hayan cotizado? No sé si la solución es fácil o no, y si podría crear otras injusticias. Solo sé que no es justo y que no hay derecho a esa "presunción de estafador" que pretenden aplicarnos a todos por igual.
Cuando hablas del inovilismo, de la necesidad de actuar cuando las cosas van mal, se me ocurre algo.
ResponderEliminarQuizás sea una idea inocente, infantil y hasta utópica, pero en los tiempos que corren no me parece que debamos desechar ninguna, por disparatada que parezca "a priori".
Escuchaba esta mañana no sé qué emisora de radio; era un programa dedicado a todas aquellas personas que ayudaban o alguna vez habían ayudado al prójimo, de alguna forma, desinteresadamente. Una pequeña ayuda para alguien podría significar un cambio radical en la vida de otro, o incluso de toda una familia. Me vino a la cabeza una película que se llama "Cadena de Favores", donde un niño de unos 9 o 10 años diseña eso, una cadena de favores, con estructura piramidal, de modo que cada individuo debía ayudar a 2 o 3 personas, y cada uno que fuera ayudado, a su vez, hacer lo mismo... Pensémoslo; las personas afectadas, o mejor dicho, ayudadas, se multiplicarían rápidamente.
Observando el panorama actual, como tú bien dices, no se me ocurre una idea mejor de por lo menos paliar esta situación de crisis que está llevando a tantas familias a situaciones desesperadas, al menos no a corto plazo.
Además, en un mundo globalizado como éste, donde cualquier tontería grabada por un gracioso es vista por millones de personas en todos los países, a través de Internet, por qué no beneficiarse de la tecnología para intentar ayudar de esta manera, para intentar difundir y "publicitar" una inmensa cadena de favores...
Como te decía, la idea suena infantil, pero qué se perdería en intentarlo? Todos tenemos algo que puede ser una ayuda para el prójimo, aunque a nosotros nos parezca insignificante. No haría falta que fueran ayudas económicas; cualquier cosa valdría.Seguro que los beneficios serían mayores que los de cualquiera de las medidas tomadas por nuestros queridos "representantes", los políticos.
Yo, por mi parte, voy a intentar aprender cómo hacer que esto salga en Internet, Facebook...Quizás intente crear un grupo o algo parecido, con seguidores...
¿Por qué no?
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ResponderEliminarMe acuerdo, es una película muy buena, la verdad. Como dices, puede que suene utópico, pero no por ello dejes de intentarlo. Supongo que la útopía final sería que nos acostumbráramos a hacer favores y el bien, sin necesidad de devolver nada, sino por el mero hecho de ayudar. Me avisas si incias algo...
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